Hoy 22 de febrero celebramos en México el “Día del Agrónomo”, fecha en que se fundó en 1854 la primera universidad dedicada a la agricultura en el país, la “Escuela Nacional de Agricultura”, antes llamada “Escuela de Agronomía de San Jacinto”, ubicada en Texcoco, Estado de México y hoy conocida como la “Universidad Autónoma Chapingo”. El impulsor de la escuela fue el ex presidente de México, Benito Juárez García, a quien delegó al agrónomo michoacano Melchor Ocampo, quien fungió como ministro de gobernación y se encargó también de los ministerios de Relaciones, Guerra y Hacienda. Melchor Ocampo tenía conocimientos y dominio del tema debido a que durante el tiempo que vivió en Francia cursó estudios sobre agronomía y a su regreso a México desempeñó importantes cargos políticos. El objetivo era crear una institución capaz de enseñar a los jóvenes el desarrollo del campo mexicano y las técnicas de producción agrícola para el autoconsumo nacional. Su propósito principal fue el formar administradores de fincas rústicas, mayordomos inteligentes, agrónomos y veterinarios. Así comenzó a funcionar la institución de educación agrícola más antigua de Latinoamérica. Teniendo como finalidad mejorar la calidad de los alimentos incidiendo en los procesos productivos de los mismos, así como sus mecanismos de obtención. Posteriormente, congruentes con su compromiso social, los profesionistas de esa época, crearon las brigadas para el desarrollo rural integradas principalmente por ingenieros agrónomos, médicos veterinarios y trabajadoras sociales que enseñaban a los campesinos las técnicas agropecuarias más apropiadas para obtener mejores resultados en sus tareas productivas, justificando aún más el papel relevante de la educación agrícola superior.
En México la agricultura es una de las actividades prioritarias y más importantes, porque no sólo genera gran cantidad de empleos, sino que también responde a las necesidades alimenticias de millones de personas, preserva los entornos naturales y estimula el progreso al mejorar la calidad de vida en las zonas rurales del país. México es una de las cunas de la agricultura mesoamericana, donde se domesticaron varias plantas como maíz, frijol, chile, calabaza, cacao, entre otros. No obstante, también en el país se trabaja el sector agrícola y pecuario, siendo los sectores más dinámicos, representando una parte de actividad económica que va en alza defendiendo la actividad de crianza y engorda de animales.
La combinación de la agricultura y el desarrollo de la misma dieron como fruto la necesidad de expertos cuyas aportaciones básicas de la ciencia de la agricultura generaran un campo más productivo, sustentable y exitoso. Una de las necesidades básicas del mexicano es tener una alimentación sana y balanceada, y producir estos alimentos administrando recursos, es una de las principales funciones de los agrónomos.
Los ingenieros agrónomos, son el eje que compone el desarrollo económico y el desarrollo social del país porque con su trabajo establecen la base del bienestar para los habitantes del campo. Poseen el don de reconocer y comprender la voz de la naturaleza, son sensibles y cuidadosos de las necesidades y el tratamiento de los recursos naturales de nuestra madre tierra.
Sus capacidades permiten identificar y resolver los problemas que se presentan en los procesos productivos del sector agropecuario y optimizan la complicada labor de la producción de alimentos agrícolas, considerando investigación, innovación y sustentabilidad, por lo que continuamente se mantienen actualizados de la propia evolución de la naturaleza y de los avances tecnológicos en los que apoyan la eficiencia de su trabajo.
En “La Voz del Campo”, hoy rendimos homenaje a todos aquellos profesionistas, mujeres y hombres, que dedican su conocimiento a la importante labor de impulsar el campo que nos provee de alimentos, personas que día a día con conocimientos en diversas ciencias aplicadas al campo, optimizan y dan capacitación, estando involucradas en el proceso de producción de alimentos agrícolas. Resaltando su constante búsqueda de nuevas y mejores formas de producir alimentos que llegan a todos los hogares mexicanos, levantando a México en estos tiempos tan difíciles, ¡gracias Agrónomos, feliz día!